Estudio para la detección y prevención de plagas en los cultivos de cereal en Zamora

La Cámara Agraria Provincial de Zamora ha presentado los resultados de un estudio sobre varias plagas que afectan al cultivo de cereal en la provincia. Este trabajo se viene realizando desde el año 2004 por el equipo técnico de Comercial Nuño.
El estudio hace un seguimiento de las plagas atendiendo a su descripción morfológica, a su ciclo biológico y a los daños que provocan en el cultivo de cereal.
 Los insectos estudiados son los siguientes:
  • MOSCAS DE SIERRA (Cephus pygmaeus y Trachelus tabidus).
  • TRONCHAESPIGAS ( Calamobius filum ).
  • NEFASIA (Cnephasia pumicana ).


Se enumeran a continuación algunas de las conclusiones alcanzadas con el estudio, relativas a las Moscas de Sierra y Tronchaespigas:
  1. Los adultos de las Moscas de Sierra  y el Tronchaespigas aparecen en los sembrados durante la última semana de abril. Pudiendo permanecer en ellos hasta mediados de junio.
  2. No se han apreciado diferencias significativas en función del tipo de laboreo realizado, aunque una mayor destrucción de los restos de cosecha (lugar donde se cobijan las larvas de estos insectos durante el invierno), debería dificultar la proliferación de estas plagas.
  3. Los distintos tipos de abonado, así como la fecha de siembra, parecen no ser factores que influyan en la intensidad de los daños.
  4. El clima influye sobre el desarrollo de las larvas, viéndose más afectadas por la lluvias que por las bajas temperaturas. Parece que un invierno frío seguido de una primavera lluviosa puede aumentar la mortandad de larvas que se cobijan en los rastrojos de cereal.
  5. El Tronchaespigas muestra una clara preferencia por los trigos, pero con desigual incidencia entre variedades.
  6. Las Moscas de Sierra provocan daños tanto en trigos como en cebadas, y aunque en general son menos graves, son más intensos en los bordes de las parcelas.
  7. De las Moscas de Sierra es el Trachelus tabidus el que predomina frente al Cephus pigmaeus. Pero el causante de los daños más graves es el Calamobius filum.
  8. Los daños más tempranos que muestra el cereal son los causados por el Tronchaespigas, mientras que los daños que provocan las Moscas de Sierra empiezan a verse casi un mes después.
  9. El adelanto de la fecha de siega permite recolectar una parte importante de las plantas dañadas, por lo que se disminuirían las pérdidas de cosecha. Además, en el caso del Calamobius filum se pueden destruir un gran número de larvas que aún continúan desplazándose por el interior de las cañas.
  10. La presencia de zonas arboladas, matorrales y cursos de agua (como arroyos, etc.) cerca de los campos de cultivo no parecen guardar relación con el desarrollo de estas plagas. Aunque se sabe que la flores de color amarillo atraen a los adultos de las Moscas de Sierra.
  11. En la rotación de cereales cobra importancia la cebada frente al trigo, al verse menos afectada por los ataques del Tronchaespigas.
  12. La rotación de cultivos distintos al cereal puede ser de gran utilidad, a al hora de disminuir las poblaciones de insectos.
  13. Los tratamientos ensayados en invierno sobre los restos de cosecha y sobre la semilla de siembra no ha presentado eficacias que puedan considerarse de interés.
  14. Los tratamientos realizados sobre el cultivo con Lambda Cihalotrín (clasificados como preventivos y enfocados al control de adultos), fueron los que presentaron una mejor eficacia en el control del Tronchaespigas, incluso a las dosis más bajas. Esta aplicación debe realizarse en la 2ª quincena de abril, unos 10-15 días antes del espigado del cereal.
  15. Los tratamientos realizados de forma paliativa, los más tardíos, con larvas presentes en el cultivo, no mostraron una eficacia relevante en el control de larvas de Calamobius filum, Cephus pygmaeus y Trachelus tabidus.

Las cunclusiones respecto a la Nefasia:
  1. La Cnephasia pumicana está presente en todas las localidades de la demarcación de Fuentesaúco, siendo las zonas más afectadas los municipios limítrofes con las provincias de Salamanca y Valladolid: La Bóveda de Toro, Castrillo de la Guareña, Vadillo de la Guareña, Olmo de la Guareña, Vallesa de la Guareña, Cañizal, Fuentelapeña, Fuentesaúco, Villaescusa y Villamor de los Escuderos.
  2. Los pinares son las principales zonas de hibernación de las larvas de nefasia, aunque se ha observado que pueden hibernar en encinas y almendros en las lindes de los campos de cereal.
  3. Debido al método de dispersión de las larvas, las zonas de las parcelas más próximas a los lugares de hibernación son las que presentan los primeros daños y los más graves.
  4. Las larvas se trasladan al cultivo de forma escalonada, ya que en la misma parcela se ha encontrado larvas en distintos estadios de desarrollo conviviendo al mismo tiempo.
  5. El periodo de migración conprende desde el mes de marzo hasta el mes de mayo, ya que necesitan temperaturas suaves y viento.
  6. Los primeros daños que presenta el cultivo son las galerías o minas que provocan las larvas en estado L1, L2 y L3 y deben de servir al agricultor como aviso de la presencia de nefasia en el campo.
  7. Los daños más graves los provocan las larvas en el estadio L4 , L5 y L6: espigas blancas, mal nutridas, incompletas y mal formadas.
  8. La nefasia provoca daños en todo tipo de cereales, atacando con la misma intensidad tanto trigos como cebadas. No se ha encontrado diferencias significativas entre variedades.
  9. Las aplicaciones con Clorpirifos 48% son eficaces. La dosis dependen del grado de infestación (0,5 l/ha., 1 l/ha. y 1,5l/ha.). El umbral de tratamiento utilizado es la presencia de 40 larvas por metro cuadrado de cultivo.
  10. El momento óptimo para realizar los tratamientos con insecticida es durante el mes de abril, antes del espigado del cereal y con el mayor número de larvas presentes en el cultivo. Durante las campañas 2007-2008 y 2008-2009 se determinó que era entre el 1 y el 15 de abril.
  11. Esta plaga puede utilizar plantas espontáneas como huésped intermediario durante su dispersión y completar perfectamente su ciclo biológico en gramíneas adventicias, como la avena loca. La utilización de herbicidas para eliminar malas hierbas, tanto las que se encuentran dentro del campo de cultivo como en sus lindes, ayuda al control de la población de Cnephasia pumicana.
  12. La rotación de otro tipo de cultivos que no sean susceptibles de acoger el desarrollo de la nefasia, limitaría las posibilidades de reproducción del insecto, y en consecuencia disminuiría el número de individuos en la siguiente campaña.
  13. Las siembras tardías podrían ser una práctica cultural favorable para el control de la plaga. Las larvas mueren si al trasladarse desde las zonas de hibernación a los campos de cultivo no encuentran plantas de cereal.

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